jueves, 23 de julio de 2009

De regreso a la realidad…



De regreso a la realidad…

Creo que ahora tendré que tomar un descanso para reposar de mis vacaciones… hace días que regresé pero aún no puedo tomar el ritmo… fueron días intensos, increíbles, mágicos… pero muy cansados… un poco apresurados, pero muy provechosos, como alguien me dijo por ahí… pude disfrutar a mi familia y visitar a mi hermana que vive lejos, por cierto que Cynthia y Anthony fueron estupendos anfitriones, gracias por sus finas atenciones, espero corresponder pronto.

Y bueno, tengo tanto que contar, cada día, una experiencia diferente, recorrí varios estados del Noreste de Estados Unidos, algunos ya los conocía, pero son lugares tan hermosos que bien vale la pena visitarlos de nuevo. Conocí mucha de la historia de nuestro país vecino, fui testigo de la congregación de personas de todo el mundo…

Estuve en las Cataratas del Niágara, en Buffalo, New York, Dios mío, presenciar la fuerza indomable de la caída del agua a esa altura… descubrir el misterio del arcoíris, verlo aparecer a unos centímetros de distancia, sentir la brisa de esa agua tan cristalina mezclada con el viento que nos llegaba de golpe a la cara… fue sensacional… es lo más maravilloso que han visto mis ojos… y vaya que presencié cosas singulares a mi paso por esas hermosas tierras…

Me pasó algo muy curioso, una de las veces que entré al baño estando en las cataratas, fue increíble la sensación que tuve… estaba lleno, y en ese momento, me di cuenta que estuvo muy bien representada las Naciones Unidas, me percaté que estábamos haciendo fila en ese baño, una española, una argentina, una anglosajona, una china, una afroamericana, una hindú, y claro, yo como mexicana… me hubiera encantado haber traído mi cámara conmigo en ese momento… pero finalmente percibí que éramos simplemente mujeres con la necesidad de ir al baño… todas iguales de algún modo, todas con la misma sensibilidad, necesidades, afectos y nuestros respectivos defectos; lo único que nos diferenciaba era nuestra complexión, el color de la piel, ojos, cabello, nuestro idioma, y el gusto por la comida, pero nada más…

Visité Boston, Massachusetts, en donde conocí un poco más de su cultura, fue Boston una de las trece primeras colonias de Inglaterra en Estados Unidos en el año de 1607, así que casi todo ahí es de estilo colonial… es fascinante ver como cada lugar tiene algo que contar, desde los antiguos cementerios que datan de esas fechas, las primeras capillas, sus inmensos y grandes edificios los cuales se entremezclan con los de arquitectura contemporánea, sus bellísimos parques, su forestación y grandes lagos, que fueros verlos para mí una delicia, ya que yo vivo entre el desierto y el mar…

Tengo tanto que contar, pero no sé porqué, de algún modo, tengo mis ideas dando vueltas en mi cabeza, necesito ponerlas en orden para después contarles un poco de los momentos que allá viví… por ejemplo, esa hermosa noche estrellada que me dio la bienvenida… y que al siguiente día pude disfrutar a una luna completa para mi solita…



Cataratas del Niágara, en Buffalo, NY

King's Chapel in Boston, MA.

El puente de Brooklin en New York.